domingo, 15 de agosto de 2010

aaaaaasiii no mas poh...


Infinidad de veces siento poder el cielo tocar, pero al instante caigo al suelo recordando que tan solo es un sueño más en mí mente. Muy dentro de mí me dice que tan cerca tengo el cielo, pero la razón me hace ver la realidad. Aunque el mundo se ponga de moda con sus ideologías y pensamientos, por muy maltratado y débil que parezca. Podré tratar de recurrir a las apariencias, podré querer rechazar y negar, pero sabes bien que siempre saldrá a flote, siempre sobresaldrá esa luz, por muy oscuro que se tornen nuestros caminos. Si en algún momento dejo de existir, si por alguna causa desconocida mis ojos se cierran impidiendo seguir contemplando tú mirada, si por alguna razón mi cuerpo deja de producir calor y si a mi alma se le escapará el último aliento de vida, vivirás en mí por el resto de los siglos. Se que te envolviste en tu vida y en tus afanes, se que por un momento me olvidaste, pero el hecho de saber que aún estabas bien me hacia inmensamente feliz, tan sólo escuchar tú voz en alguna escasa llamada telefónica, me hacía recordar con alegría. Tal vez esto no lo llegues a escuchar de mí boca, se que no me atreveré a decírtelo nunca. No nos queda más que seguir en esta vida, llena de envidias, interrogantes y sueños.

Soñar forma parte de nuestra vida, necesitamos de esta dimensión que refleja nuestros deseos. Es la inspiración divina que nos da fe y esperanza y nos anima a creer que lo imposible puede tornarse posible.

No hay comentarios:

Publicar un comentario