Volviendo a ser Yo...

En algún momento de mi vida se me cruzo por mi cabeza una irracional idea de cambiar…cambiar que?, para que?, a caso en mi vida hay algo que no anda del todo bien?
Debería hacerlo?
Uno siempre tiene una idea en mente o por lo menos algo piensa sobre sí mismo, en eso estaba cuando se me atraviesa esta idea que me hace pensar, replantearme argumentos de conducta, en definitiva, pone en jaque todas mis creencias. Sólo pienso en ello, en si de verdad estoy haciendo bien las cosas, uno siempre recibe críticas de diferentes sectores, algunas más destructivas que constructivas, son esas últimas las que me hacen replantearme y mirar desde dentro mi pasado y mi presente. Todo es confuso, no logro comprender lo que esta mal. Trato de justificar el cambio en motivos externos, en cosas que los demás creen que debería ser, en opiniones dadas por seudos amigos, siempre justificando en base a factores externos, pero a caso no será que realmente sea yo quien de verdad quiere hacerlo? o quizás puede ser que estoy tan influenciado por lo externo que me alejo de mi esencia?
Pienso, pienso…distintos días, deferentes estados de ánimo, el resultado?, es el mismo, aun no se que es. Por un momento dejo de pensar en ello, desvío mi mente de lo confuso, lo abstracto y la pongo en concreto, saco un libro de la estantería y dejo que mi mente se cautive y despegue de imaginación. No pasa mucho tiempo cuando algo me recuerda mi disyuntiva, las imágenes, los bellos lugares se borran y dan lugar a preguntas sin respuestas.
Estoy harto!, porqué tiene que ser todo tan vago!
Iracundo golpeo mi cabeza y digo suficiente!, no doy más!
Es hora que rearme mis ideas y ponga termino a esta locura, cierro mis ojos y dejo que converjan las ideas en mi cabeza.
Lo cierto es que, me doy cuenta que siempre supe que era, pero estaba tan cerrado y tan envuelto en lo cotidiano, que no supe darme cuenta que la gran respuesta estaba frente a mí. Yo ahora me pregunto para que cambiar?, si cuando se hace, nadie lo aprecia?, en definitiva llego a la lógica conclusión que me es absurdo ser algo que no soy, lamentablemente este conjunto de defectos que conforman mi estilo, van a perdurar hasta el cese de mis días en este mundo. Por lo cual desecho y mando a la misma mierda el maldito cambio, al final de todo, somos lo que hacemos, para ser lo que somos…y es tan corta nuestra estadía en este mundo que no me pasaré la vida pensando en como soy, simplemente seré…

Moraleja: Lamentablemente la persona que no daña, termina dañado!